QUEMAR Y EMBOLSAR LAS HOJAS SECAS CONTAMINA EL AMBIENTE
03 de Mayo
Las hojas secas no son residuos, sino una fuente de materia orgánica que enriquece la fertilidad de los suelos.
Al caer, devuelven al suelo los nutrientes que los árboles absorbieron previamente de él. Dejarlas en el suelo o al pie de los árboles contribuye a su salud, protege contra las heladas y retiene la humedad, especialmente importante en épocas de sequía.
La práctica de embolsado y descarte de las hojas en otoño es innecesaria y perjudicial para el ambiente, además significa desaprovechar un recurso orgánico valioso y sumar un residuo plástico al ambiente.
La mejor opción es dejarlas en el suelo o acopiarlas en un sector del jardín, lejos de desagües, para que se conviertan en una "tierra de hojas", un abono natural rico en nutrientes.
Por otra parte, tampoco se deben quemar porque producen humo y monóxido de carbono, contaminando el aire y poniendo en riesgo la salud de las personas. En ese sentido, la ordenanza municipal Nº 4.674, vigente desde 2013, prohíbe la quema de cualquier tipo de especie natural, bajo pena de multa.
Para obtener más información sobre su correcto tratamiento, la Municipalidad de Chascomús ofrece manuales de compostaje de forma libre y gratuita.
Allí, se detalla cómo aprovechar los residuos orgánicos generados en el hogar o en el lugar de trabajo.
Para acceder a esta información, se puede visitar el enlace linktr.ee/ambientechascomus, seguir las redes sociales @ambientechascomus, o escribir al correo electrónico girsu@chascomus.gob.ar.